Vistas de página en total

martes, 9 de abril de 2013

CAPÍTULO 6

(CUENTA LALI)

Estaba muy nerviosa, después de tanto tiempo lo tenía ahí, a unos pocos metros.
Estuve esperando con mis hermanos fuera de la casa hasta que Euge salió a avisarnos de que cuando nos llamara podíamos entrar. Por fin nos llamó, y entramos.
Mi amiga nos presentó, sus amigos se levantaron a darnos dos besos, Nico nos dio un abrazo enorme, y entonces vi a Peter, sentado en el sillón, no se movia, me miraba.
Estaba muy cambiado, estaba tan guapo. De repente nuestras miradas se cruzaron y nos miramos a los ojos, estuvimos así unos segundos hasta que...

(CUENTA PETER)

Euge dijo que nos tenía que presentar a unos amigos de la infancia, no tenia ideas que quien podia ser. En eso que entran por al puerta, y los vi. Los hermanos Espósito. No lo podia creer, eran ellos, esa ella.
No se hacen una idea de cuanto los extrañé, lloré durante horas porque Lali se fue y ahora estaba acá, conmigo.
Me quedé mirándola, estaba tan linda, estaba hermosa. De repente nuestras miradas se cruzaron, y se clavaron la una en la otra, estuvimos asi unos segundos hasta que...

Agus: ¡Peteeer!

Peter: ¡Aguus! (Nos abrazamos)

Vico: ¡Peteer!

Peter: ¡Vicoo! (Lo abracé también)

Agus: ¿Como estás?

Peter: ¡Muy bien! ¿Ustedes?

Vico: Nosotros tambien muy bien.

Peter: Chicos me re alegro, no saben cuanto los extrañé... (Con los chicos nos volvimos a abrazar)

Agus: Nosotros también a ti. Lali, ¿No saludas a Peter?

Lali: Hola, Peter.

Peter: Hola.

En ese momento, vino y me abrazó. Me dio un abrazo muy fuerte, y tuve la mejor sensación del mundo, tuve una sensación de paz y tranquilidad, de tristeza y alegria, de nostalgia y de felicidad. Era feliz. Su perfume de coco se penetró en mi, olía especialmente bien, y se perfume quedó en mi.
Después de estar así abrazados unos segundos, nos separamos y nos miramos a los ojos, nos sonreímos. Le tenía que decir tantas cosas.
Pero, notaba que algo fallaba, algo estaba mal en todo esto. Ella estaba cortante, distante, insegura, no la notaba igual, era distinta.

Lali: (Siempre me habló muy cortante) ¿Cómo estas?

Peter: De diez, ¿Vos?

Lali: ¡Muy bien también!

Peter: Me alegro...

Nico: Dale chicos, basta de hablar, cuentenos, que fue de se vida todo este tiempo.

Vico: Pues lo de siempre, me formé como policía y empecé a trabajar allá en España, pero hace poco me dieron el translado aquí a Buenos Aires, y decidimos mudarnos, además no biene bien cambiar de aires y recordar viejos tiempos.

Agus: Sí, la verdad que esta todo igual, no cambió nada de como lo recuerdo.

Cande: ¿Por qué conocen ustedes a los chicos?

Vico: A Euge porque nuestros padre eran muy amigos, eramos como hermanos, y sus padres como tíos. Y Peter y a Nico, fue porque un dia cuando vinimos a visitar a la familia de Euge los conocimos.

Rochi: Aaaay, que lindo. ¿Y cómo se conocieron?

Agus: En realidad la que los conoció primero fue Lali, es una historia graciosa. Cuando Lali iba a comprar gominolas, y cuando volvía a casa de Euge, Peter que iba con la bici se la llevó por delante, y así se conocieron ellos dos. Después ya nos presentamos los demás y eso. La verdad que en una semana nos hicimos muy buenos amigos, y aun la distancia, siempre han sido como nuestros hermanos.

Gas: No entiendo, ¿Por qué en todo este tiempo no los conocimos?

Vico: Es una larga historia... Cuando volvíamos a España ese mismo verano, tuvimos un accidente con el avión, mi padre murió ahí. Al poco tiempo nuestra madre nos abandonó, y cuando yo fui lo suficientemente meduro como para encargarme de ellos dos, nos independizamos los tres juntos, y vivíamos de lo que yo ganaba y de la herencia de mi padre.

Gas: Perdoname, no quieria que te sintieras mal.

Agus: No, esta todo bien, ya lo superamos.

Euge: Lali, ¿Qué te pasa? Estás muy callada... Con lo que vos hablás.

Lali: No me pasa nada, solo que estoy cansada, nada mas...

Poli: ¿Y se van a incorporar ustedes dos a las clases?

Agus: Sí, mañana empezamos.

Lali: Iremos al mismo colegio.

Daky: Que bueno, son muy buena gente chicos.

Nico: Che, creo que nos tenemos que ir yendo...

Poli: Sí, es tarde, mañana hay clases.

Euge: Lali, ¿Porque no te quedás acá en casa a dormir y así mañana vamos juntas hacia el colegio?

Lali: Bueno, Vico, ¿Puedo?

Vico: Claro.

Lali: Bueno Euge, acompañame a por el uniforme a casa, por favor.

Euge: Vamos.

Nico: ¿Y vos Agus? Venite a casa, así mañana vamos juntos también.

Agus: Bueno, voy.

Y así pasamos la tarde, hasta que nos fuimos. Lali estaba muy cortante, teniamos que hablar pero no sabía como le iba a explicar todo lo que le tenía que decir.

(CUENTA LALI)

La verdad que los amigos de Euge me cayeron muy bien, son muy buenos chicos, todos.
Por la noche Euge me acompañó a casa a por el uniforme, porque dormia esa noche con ella.
La verdad que estaba nerviosa porque mañana sería mi primer día en el Rockland, y esperaba empezar con buen pié. Una vez estábamos acostadas, Euge notó que estaba nerviosa.

Euge: Tranquila amiga, va a estar todo bien.

Lali: Eso espero...

Euge: Ahora, ¿Me podés decir una cosa? ¿Por qué estuviste así hoy con Peter?

Lali: No lo se, no me salía de otra forma. La verdad que me dolió mucho que en estos años no quisiera saber nada de mí, y no sabía como encararlo.

Euge: Yo solo digo una cosa, ustedes dos tienen que hablar.

Lali: Sí, lo se. Ya veré cuando...

Euge: Aaaaay, Lalonga, es que todavía no caigo, estoy tan feliz de volverte a ver.

Lali: Yo también Euge, no sabes lo que te necesitaba.

Nos dimos otro abrazo, después de los novecientos mil anteriores, y nos dormimos. Mañana iba a ser un gran día.

No hay comentarios:

Publicar un comentario