CAPÍTULO 13

(En el capítulo anterior)

Peter/Lali: Perdoname.

(CUENTA PETER)

Peter: Eeemmm... Sí... Vos primero.

Lali: No, empieza tu.

Peter: No, las damas primero, ¿No es así?

Lali: Sí, bueno. Ya te he dicho que me perdones. Porque durante toda esta semana en la que has estado pegado a Paula, he estado mal contigo. No es que esté celosa, pero esque me da bronca que te lleves así de bien con ella. Sabes que me odia. Y no te lo digo como un reproche, ni mucho menos. Solo que me molesta,  tan solo era eso. Tampoco quiero decir que no puedes estar con ella, porque no soy nadie para decirte que no lo hagas, porque no soy tu madre, ni tu novia... Pero si quieres estar con ella, pidele salir... No me importa... Bueno sí... Bueno nose... Me importa pero de la forma que me tendría que importar... O sí... ¿Por qué no mejor hablas tú?

Peter: Jaja Sí, mejor. Bueno yo también te querí pedir perdon por eso, por lo de Paula. Mirá, a mi no me gusta Paula, ni me interesa, ni me importa. Hice lo que hice con Paula porque, nose, no se porque lo hice. Puede que sea por vos.

Lali: ¿Por mi?

Peter: Sí, esto... Esque tenía miedo, bue, tengo miedo. Tengo miedo de acabar... ¿Enamorandome?

Lali: ¿Qué? ¿Enamorandote?

Peter: Sí, eso. Enamorandome... Porque puede ocurrir.

Lali: Sí, osea, poder puede. Pero, quieres decir que, ¿También te puedes enamorar de las demás chicas?

Peter: No, esque no es lo mismo

Lali: ¿Por qué?

Peter: No se. A ver, puede que esto suene raro, pero, a veces, cuando estas con otros chicos me pongo celoso. A veces me entran ganas de besarte. A veces tengo la sensación de que te quiero como algo más que una amiga.

Lali: ¿Qué?

Peter: Eso...

Me acerqué y me quedé a dos centímetros de su boca. Estábamos a punto de besarnos, pero entonces nos interrumpió una vos.

Euge: ¡Perdón!

Lali: ¡Eu! No, no pasa nada, entra.

Euge: Sí... Esto... Peter, que nos vamos, Vico dice que si te quedás vos con Lali, mientras vamos a comprar unas cosas.

Peter: Sí, yo me quedo con ella...

Euge: Bueno, me voy. Siento haber interrumpido.

Lali: No seas tonta Euge, no has interrumpido nada.

Euge: ¿Seguro?

Peter: Sí Euge, ¿No te ibas?

Lali: ¡Peter!

Euge: No, dejá... Ya me voy. ¡No chapen mucho eehh! Jajaja

Y se fue. Yo y Lali nos volvimos a quedar a solas.

Peter: Esto... Lali...

Lali: Dejá, no me expliques nada. No quiero que esto vaya tan deprisa, es decir, no esque no quiero que vaya...

Peter: ¿Qué?

Lali: Eso, que yo también te veo como algo mas que un amigo.

Peter: (una sonrisa enorme se dibujó en mi cara) ¿Enserio?

Lali: Sí. Pero esque no quiero que pase algo, que se arruine todo, y que no podamos volver a mirarnos a la cara.

Peter: Sí, tenés razón. ¿Entonces?

Lali: ¿Somos amigos?

Peter: ¿Con derechos?

Lali: Me parece bien, amigos con derecho.

Sonreímos y nos miramos. Por segunda vez nuestros labios estaban a dos centímetros, y ahora sí. Nos unimos con el beso más lindo que vi en mi vida. Sus labios se notaban carnosos y suaves. Tenían sabor a fresa. La verdad, que Lali besaba muy bien.

Peter: Mmm... Laa (beso) Laa (beso) ¡Lali!

Lali: ¡¿Qué?!

Peter: Jajaja Nada, me vas a dejar sin aire.

Lali: Jajaja Bueno... Peter...

Peter: ¿Qué? (beso)

Lali: No me hagas daño, por favor.

Peter: Antes me maato. No voy a cometer otro error contigo.

Lali: Te quiero.

Peter: Yo también.

Pasamos la tarde en el hospital riendo, jugando, hablando, y hubo algun que otro beso. La verdad que en ese momento sentía unas mariposas en la panza, que no paraban de volar. Estaba feliz, por fin estaba bien del todo con Lali.


(CUENTA LALI)

La verdad que en ese momento, estaba feliz.
Me sentía muy bien, la verdad, mejor que nunca. Aunque estuviera en un hospital, estaba bien porque él estaba conmigo. Aunque había algo que me preocupaba.

Conciencia de Lali: Lali, por dios, no puedes estar mejor. Aunque admitelo Mariana, admitelo, tienes miedo. Sí, tengo miedo. Tengo miedo de que esto no salga bien y que se termine nuestra amidstad. Tengo miedo a que me haga daño. Tengo miedo. Aunque Peter me prometió que no me iba a lastimar, así que, voy a confiar en el, sí, voy a confiar y a vivir el momento.

Peter: Lali, Laa.

Lali: (saliendo de sus pensamientos) ¿Qué? ¿Qué?

Peter: Te estoy hablando... ¿En qué pensabas?

Lali: No, en nada. ¿Que me decías?

Peter: Que llamó Vico, está de camino hacia acá.

Lali: Aaahh, esta bien.

Diez minutos después llegaron los chicos.

Agus: Lali, ¿Cómo estás?

Lali: Agus, bien, estoy bien.

Nico: ¿Te cuidó mi hermano?

Lali: Sí, me cuidó. (le lanzé una mirada a Peter)

Vico: Mejor. Bueno, chicos, no os molestamos más. Me quedo yo con ella esta noche, mañana teneis clases así que id a casa.

Agus: No, yo me quedo con vosotros.

Peter: Yo también.

Euge: Y yo.

Vico: No, me quedo yo, vosotros os vais. Mañana la Lali va a casa, allí la vereis.

Agus: Bueno, pero si pasa algo, nos llamais eehh.

Lali: No me va a pasar nada, cachetón. Soy como un tronco, soy fuerte.

Cande: Jajaja Sí amiga, sos fuerte y también te la creés mucho.

Lali: ¿Yo? Perdón pero soy muy humilde... Jajaja

Mery: ¿Sí? No me di cuenta...

Todos: Jajaja.

Y así los chicos se fueron. Todos se despidieron con un beso en la mejilla, menos Peter, que me dejó un beso en la comisura de los labios. Yo le dediqué una sonrisa.
Todos salieron de la habitación, y me quedé asolas con Vico.

Vico: Bueno, es la primera vez que nos quedamos solos desde que hemos venido aquí a Buenos Aires. Una lástima que tenga que ser en un hospital...

Lali: Si...

Vico: Mira Lali, yo se que nunca me he comportado como el hermano mayor que tenías que tener, pero yo lo intento hacer lo mejor que puedo. Eres mujer y estás en una edad complicada. Mamá no está y entiendo que hay cosas que no le puedas contar a tus amigas. Por eso te quiero decir que yo te voy a escuchar, y te voy a ayudar en todo lo que pueda. Quiero que empezemos de cero, que nos olvidemos del avión, de mamá, y de España. Ahora, Agus, tu y yo vamos a ser felices. ¿Borron y cuenta nueva?

Lali: Sí, pero igual te quiero decir algo.

Vico: ¿El qué?

Lali: Mira, no quiero que pienses que has sido un mal hermano, porque no es así. Eres el mejor hermano mayor del mundo, igual que Agustín. De verdad que no sabría que hacer si no estuvierais, porque vosotros dos sois los que me sosteneis, los que me ayudais a seguir adelante, los que me apoyais y los que me cuidais.

Vico: No Lali, no te he cuidado lo suficiente. (llorando) No paro de pensar en que te hubiera podido pasar algo, cuando te quedaste encerrada en el baño. Y todo por mi culpa, porque no te he cuidado. Te juro que cuando no te encontraba casi me muero.

Lali: (llorando) Eeeii, no estés mal. No es así. Tú siempre me cuidas, y eso está muy bien. Pero entiende que no me puedes tener toda la vida en una burbuja, como si fuera de cristal. Lo que también haces bien es que me dejas libertad, sin agobiarme, y si me pasa algo, que Dios quiera que no, será mi culpa, no la tuya.

Vico: No Lali, no es así.

Lali: Sí, si es así. Ahora vas a dejar de llorar, me vas a dar un abrazo, un beso, y vamos a ver una peli aquí los dos tumbaditos en la cama. Porque... ¿Has traido una pelicula no?

Vico: Claro que si hermanita, ¿Por quién me tomas? Aaaa... Y... ¡Ven aquí!

Me dio un abrazo y un beso. Después nos tumbamos a ver una película. Poco después llegó el doctor, me revisó, y me dijo que estaba todo bien. Poco después me dormí. Al día siguiente, ya estaba preparada para volver a casa.